¿QUÉ TAN PERJUDICIAL ES COMER RÁPIDO?

«Imagínate cuando comemos rápidos, y que lo que comamos no sea tan saludable para nuestra alimentación». Hay alimentos que no se pueden comer tan rápido, mucho menos cuando la comida está caliente o muy fría.

Son muchas los problemas que puede ocasionar el comer de forma rápida. Entre las menos arriesgadas se encuentran la indigestión, gases, digestiones lentas o pesadas, así como ardor o malestar estomacal. Sin embargo, si nos centramos en las más graves a largo plazo, los efectos en tu cuerpo y tu salud pueden ser fatales: sobrepeso, enfermedades del corazón, diabetes, cáncer y a hasta la muerte, ya que comer rápido puede llevar a que la persona se atore.

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Hay que entender que el proceso de la digestión comienza en la boca: «Si no masticamos bien y no preparamos adecuadamente el bolo alimenticio, evidentemente este llegará menos preparado al estómago y requerirá mayor trabajo para su digestión.

También, el hecho de comer con más calma, saborear los alimentos y masticar más veces cada bocado contribuye a la sensación de saciedad. Si comemos muy acelerado, si engullimos, no tenemos tanta conciencia del hecho de estar comiendo y tardamos más en reconocer las señales de saciedad».

¿Por qué comes deprisa? ¿Es tu manera de comer o sientes un deseo irrefrenable por llevarte algo a la boca? La ansiedad, el estrés pueden llevarte a comer más rápido y más alimentos de los que tu cuerpo puede llegar a asimilar de forma saludable. El problema surge cuando se vuelve un hábito diario y un problema aún mayor.